
En producción de huerta, plantamos una variedad de lechugas, zanahorias, perejil y cebolla. En clase hablamos sobre ellas, sus características y cuidados.
A continuación, hablaré sobre ellas:
Plantamos dos tipos de lechugas las cuales son las siguientes:
Lechuga Común
La lechuga común tiene un color verde claro, que refleja su frescura. Su crecimiento es rápido y abundante.
Lechuga Divina
La lechuga divina, por otro lado, destaca por su color verde intenso y vibrante, que destaca su alta calidad. Su crecimiento es más lento que la lechuga normal lo que garantiza su sabor excepcional.
Zanahoria: es un cultivo bianual, el primer año engrosa su raíz y el segundo completa su ciclo produciendo semillas la época ideal para sembrar zanahorias es entre abril y julio. Tarda entre 8 y 20 días en germinar.
Cebolla: es una planta bienal que completa su ciclo biológico en dos etapas: vegetativa y reproductiva. En la etapa vegetativa, que tiene lugar el primer año de siembra, da origen a la formación del bulbo. En la segunda etapa, que se da en el segundo año, a partir del bulbo, la cebolla florece y produce semillas.
Perejil: su cultivo es muy sencillo y perfectamente adaptable a maceta en casa. Tarda bastante en germinar, normalmente 3 o 4 semanas y desde la siembra hasta la primera cosecha pueden pasar unos 3 meses, así que una buena opción es comprar plantón y transportarlo directamente para acortar el proceso.
La lechuga, la zanahoria, la cebolla y el perejil son cultivos importantes que aportan nutrientes esenciales y beneficios para la salud. Cada uno tiene características únicas que los hacen valiosos en nuestra alimentación. Además, su cultivo es sencillo, lo que permite que todos puedan aprender sobre ellos y disfrutar de sus propiedades.