
En un pequeño pueblo rodeado de montañas, vivía una niña llamada Sofía que adoraba las estrellas. Cada noche se escapaba al campo con su linterna y un viejo telescopio que había heredado de su abuelo.
Una noche, mientras miraba el cielo, notó que una estrella brillaba más que las demás, casi como si quisiera decirle algo. Sofía pidió un deseo, “quiero ser amiga de esa estrella”, cerró los ojos y cuando los abrió apareció en un lugar lleno de luces. Estaba en el cielo, rodeada de estrellas que bailaban a su alrededor. La estrella que tanto admiraba le sonrió y se presento como Stella.
Stella le contó historias sobre planetas, las galaxias y los secretos del universo. Sofía se sintió emocionada al escuchar dichas historias. Y sin darse cuenta , amaneció y Stella le dijo que debía regresar a la tierra, pero que siempre la acompañaría desde el cielo.
Desde entonces, cada vez que Sofía miraba el cielo sabia que allí estaba su amiga Stella, guardándole secretos y recordándole que siempre estará alumbrando su camino.
Autor: Luján Montaño.
Curso: 6to 2da