Había una vez en una aldea inca con murallas casi impenetrable alejado de Cuzco la capital del imperio inca, en donde vivía un pequeño niño no sabía lo que el futuro le deparaba, se llamaba Tuld, era hiperactivo, travieso ,juguetón y cariñoso.
Un día salió del pueblo yendo a la selva dónde se escondía en árboles, alli disfrutaba viendo animales asombrosos jaguares, caimanes, cocodrilos, flamencos, ranas, entre tantas cosas maravillosas.
De vuelta a la aldea en mitad de camino de regreso, Tuld vio unos hombres, presentaban diferentes características a los de su pueblo eran de estatura baja, blancos, su rostro era alargado y portaban una vestimenta plateada, Tuld extrañado con la presencia de estás personas no sabía cómo reaccionar. en definitiva quedo semiparalizado queriendo reaccionar mientras observaba a los forasteros.
Pasados unos minutos se sintió una suave voz que venia de detrás de él, sorprendido descubrió que era su amigo Towné y le dijo:
Towné – Tuld que estás mirando?
Tuld – eso que está ahí, (señalando a los visitantes).
El amigo se acercó lentamente, mientras Tuld se lo devoraban los nervioso por la reacción que podrían tener esos hombres.
Los hombres plateados empezaron a hablar en un idioma que Tuld y Towné no entendían. Towné se acerco de más y la reacción de los hombres hizo que éste se asustara y intentará escapar. los pequeños hombres atacaron y lo capturaron realizándole una herida, un pequeño agujero con un instrumento que emanaba una luz fuerte.
Tuld no pudo hacer nada y se fue asustado corriendo con pensamientos tristes pensando que fue, un egoísta, un cobarde y un miedoso, por no haber podido salvar a su amigo.
Al llegar a las murallas del pueblo fue corriendo a la sala del jefe y dijo:
Tuld – jefe, jefe,
Jefe Samuca – ¿que pasa Tuld?
Tuld – unos extraños hombres se llevaron a Towné
Jefe Samuca – ¿Qué? ¿Cómo sucedió?
Tuld – si se lo llevaron, pero se lo llevaron vivo
El jefe pensando en que hacer para intentar salvar a Towné, pensó, pensó y dijo:
– Jefe Samuca mandaremos a un equipo de rescate y irán armados no sabemos si son hostiles.
Al siguiente día, Tuld esperaba buenas noticias pero, de repente llegó el grupo de rescate con buenas noticias y malas noticias.
Explorador inca – jefe jefe
Jefe Samuca: – ¿qué pasa?
Explorador inca -llegó el grupo de rescate
Jefe Samuca – enserio?, vamos a ver.
Explorador Inca – entendído
Cuando llegaron a ver al grupo de rescate vieron que Tuld ya estaba con ellos, cuando se acercaban vieron que faltaban algunos hombres, estaban con sangre y a Towné con heridas graves y en manos de un explorador.
Tuld viendo lo que había pasado grito y dijo:
Tuld – ayuda Towné necesita ayuda por favor por favor.
De repente unos soldados se llevaron a Towné a una campaña donde le intentaron curarle las heridas pero fue demasiado tarde para poder salvarlo, las heridas fueron demasiado profundas que no se pudieron curar y por el tiempo y la pérdida de sangre fueron las causas de que falleciera.
El Jefe Samuca enojado dio la orden de preparar el ejército, no bajar la guardia en ningún momento y vigilar a los hombres extraños.
Pasaron meses en qué los hombres extraños que ahora serian llamados por los incas, Misu.
Durante meses hubo muchos enfrentamientos dónde todo estaba siendo muy igualado pero la guerra estaba siendo para los Misu, las batallas se definían por los suministros de cada bando la aldea de Tuld se estaba quedando sin recursos y en unos 6 meses se quedarían sin nada ya que la cosecha estaba siendo más lenta de lo habitual puesto que no estaba cayendo lluvia.
Entonces el Jefe Samuca dio a llamar a Tuld
Tuld – jefe para que me llama
Jefe Samuca – Tuld te tengo que contar algo
Tuld – ¿ qué es?
Jefe Samuca – te contaré una leyenda
Tuld – leyenda de que?
Jefe Samuca: la leyenda de la Pachamama
Tuld: ¿Pachamama, qué es?
Jefe Samuca – es la madre del tiempo, del universo, de cada lugar que estamos
Tul – increíble
El jefe Samuca le explicó lo que era la Pachamama a Tuld, le contó la leyenda de que la ésta habitaba en un templo lejos de aquí y que tenía la misión de ir al templo e intentar que la Pachamama lo ayudara a que llueva para que la cosecha prospere rápido.
Tuld entendió y recogió lo necesario para sobrevivir y se fue hacia el templo con la esperanza latente de lograr el éxito.
Pasaron meses en los que Tuld paso peligro, pero un día éste, se desvío del camino y encontró un templo; curioso entro y vio a la Pachamama. Tuld y la Pachamama se miraron, ésta última le dijo:
Pachamama – que haces aquí chico?
Tuld – estoy aquí por una misión
Pachamama – que tipo de misión
Tuld – me mandaron aquí por si podías ayudarnos a qué nuestra cosechas prosperen.
La Pachamama asintió y dijo – yo los ayudaré.
Tuld casi llorando de la emoción le dijo que fueran juntos hasta el lugar y para lograrlo la Pachamama se transformó en una ave gigante que hizo que lleguen rápido a la aldea de Tuld pero antes de que lleguen a la aldea pasaron por el campamento de los Misu e hizo que los suministros de ellos se contaminaran
Cuando llegaron a la aldea hizo que llueva y así próspero la cosecha eh hizo que los guerreros de la aldea estén en mejores condiciones que los Misu.
Y así los Misu tuvieron que abandona de las tierras de la aldea para no regresar jamas.
Tuld y la Pachamama sabian que habian logrado algo inmenso, dejar la paz y la prosperidad en la Aldea, ellos vencieron a los invasores y la naturaleza ha vuelto a reinar.